Por Mauricio López Rueda
Muy pronto estrenaremos la nueva torre de control que, entre otras ventajas, permitirá mejorar la oferta de vuelos privados y chárter, al incluir vuelos ejecutivos internacionales. Sin embargo, lo más importante es que con ella garantizaremos mayor seguridad a los viajantes y visitantes, que se cuentan por miles cada semana.
“El Olaya Herrera va a quedar habilitado para operaciones de todo tipo, pues ha sido un clamor que se le dé la posibilidad de recibir vuelos ejecutivos internacionales. Pues bien, ya he dado instrucciones para que eso sea una realidad a la mayor brevedad posible, porque Medellín es cada vez más atractiva para los grandes eventos internacionales”, señaló en la ceremonia de inauguración el Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos Calderón.
Nuestra nueva torre es un edificio de 12 niveles con una altura de 31,24 metros, con cubierta de teja liviana termo acústica, fortificación de perfiles metálicos y muros tipo drywall, un sistema constructivo que consiste en una estructura de perfiles de acero galvanizado o madera, sobre los cuales se instalan páneles incombustibles de yeso o fibrocemento que permite aislar el ruido. Desde allí tendremos un punto de vista mejorado para consolidar la operación aérea.
“Las obras en el Olaya hacen parte de un plan de modernización en diferentes terminales, como las de Montería, Quibdó, Carepa y Rionegro. En este momento hay unos árboles que impiden una visual completa, pero nos encontramos gestionando ante la autoridad ambiental, que en este caso es el AMVA, para que nos permita hacer una poda regular de los árboles y queda resuelto el problema”, sostiene Sara Ramírez, gerente de Airplan.
Otras cualidades de la torre son un ascensor, hasta el nivel 9; una instalación eléctrica de telefonía, red de voz y datos, una red de detección de incendios, mesas para consola traídas desde Inglaterra, radios VHF (frecuencia electromagnética para uso marítimo y aéreo. También lo usan ambulancias y radiotaxis), y un nuevo sistema MLT (de multilateración), que permite vectorizar los aterrizajes garantizando más precisión en el descenso. Por si fuera poco, cuenta con equipos de comunicación, faro y una estación satelital.
La torre permite una mejor visibilidad. Su amplitud, además, ofrece sitios de descanso para los controladores aéreos, garantizando la seguridad de los usuarios del aeropuerto.
“Ya nos hemos reunido en Bogotá para agilizar el proceso para que podamos recibir vuelos ejecutivos internacionales, ahora se espera que el aumento sea de más de un 10 % de viajeros y de operaciones aéreas, este aeropuerto es el segundo con el mayor número de operaciones, aquí no solamente es la aviación comercial, lo que más mueve el aeropuerto son los vuelos privados, vuelos chárter y con esta nueva infraestructura vamos a mejorar esas condiciones”, afirma Jesús Sánchez Restrepo, Gerente General del Establecimiento Público Aeropuerto Olaya Herrera.
